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| El Congreso remite al Senado una reforma fiscal cambiada |
| Las pymes gozarán en 2007 de una rebaja de cinco puntos en el tipo de gravamen |
Viernes, 23 de junio de 2006
El Congreso dio luz verde ayer a la reforma del IRPF y del impuesto de sociedades, remitiéndola al Senado, con grandes modificaciones sobre los proyectos de ley aprobados por el Gobierno y enviados a la Cámara Baja hace tan sólo tres meses.
El cambio de socios parlamentarios (ERC por CiU) del Gobierno ha provocado que la reforma tributaria haya incorporado un buen número de sugerencias de los nacionalistas catalanes desde que el Ejecutivo la aprobó en marzo en Consejo de Ministros. Para asegurarse el voto de Convergencia y Unió, tanto en el Congreso como en el Senado, el vicepresidente económico, Pedro Solbes, ha aceptado un lote de enmiendas transaccionadas con los catalanes.
Los cambios de mayor calado, que ayer aprobó el Pleno del Congreso con apoyo de PNV, CiU y PSOE, se refieren al impuesto de sociedades. El equipo de Solbes había calculado una rebaja gradual en cinco años (del 2007 al 2011) para las empresas a razón de un punto por año, para no poner en peligro la recaudación. Finalmente, las pymes gozarán de su rebaja (cinco puntos en el tipo de gravamen) ya en 2007, y las grandes empresas lo harán en dos años. Ello tendrá un coste adicional para la hacienda. Sólo la rebaja en 2007 (en IRPF y sociedades) costará 4.000 millones, a lo que habrá que sumarse los 1.250 millones de mayor coste fiscal para poner en práctica la segunda parte de la rebaja para grandes empresas en 2008, según los cálculos de la Secretaría de Estado de Hacienda.
Otro buen número de modificaciones que se han incluido en el Congreso se refiere a las deducciones en el impuesto de sociedades. La tesis inicial de Hacienda pasaba por eliminar la mayor parte de ellas. En el Congreso, las enmiendas de los grupos parlamentarios han conseguido mantener la que actualmente gozan las empresas por reinversión de beneficios. Hacienda estaba remisa a ello porque considera que gran parte de estos beneficios no se utilizan para mejorar el tejido productivo. Al final, una enmienda negociada con CiU permite mantener la deducción siempre que se demuestre que se invierte en actividades productivas.
La deducción por I+D, que inicialmente estaba condenada a la desaparición, también se mantiene hasta 2011, con el compromiso de que en ese año se estudie su efecto sobre la economía. En este punto ha pesado mucho la presión de buena parte de las grandes empresas implicadas en procesos de investigación y desarrollo. Junto a esta deducción se ha incorporado la opción a una rebaja del 40% de las cuotas a la Seguridad Social por personal investigador contratado. Las empresas deberán elegir entre esta opción o la deducción tradicional por I+D.
En el caso del IRPF, las modificaciones en el trámite del Congreso han sido menores aunque también importantes. En el Congreso se ha incrementado de 1.200 a 2.200 euros la deducción por hijo menor de tres años. Las aportaciones máximas anuales a planes de pensiones complementarios a la Seguridad Social también se han elevado en 2.000 euros. Los propietarios no tendrán que tributar por las rentas que obtengan por viviendas alquiladas a menores de 35 años.
Estos cambios se unen a los ya aprobados por el Gobierno. Entre ellos, destaca el recorte de 5 a 4 del número de tramos del impuesto; la rebaja, del 45% al 43%, del tipo marginal máximo; y la homogeneización de todos los instrumentos del ahorro bajo un mismo tipo de gravamen (18%), con independencia de su origen y plazo de generación, incluidas las plusvalías.
Grandes enmiendas. Cambios en deducciones y planes de pensiones
La reducción del 30% al 25% en el tipo de gravamen para pymes entrará ya en vigor en 2007. La rebaja del tipo general para grandes empresas se hará sólo en dos años: una primera fase (del 35% al 32,5%) en 2007 y la segunda (del 32,5% al 30%) en 2008. Se mantiene la deducción empresarial por reinversión de plusvalías, pero con la condición de que sea para actividades productivas. Las aportaciones máximas a planes de pensiones complementarios pasan de 8.000 a 10.000 euros anuales (en general) y de 10.000 a 12.500 euros (mayores de 50 años).
FUENTE: CincoDias/B. D. |
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